Nicaragua:
¿una dictadura sin fin?

En 2024 se cumplen 45 años de la Revolución Sandinista, que puso fin a una de las dictaduras latinoamericanas más longevas, ejercida desde 1936 por miembros de la misma familia, y que despertó nuevamente las esperanzas en una revolución popular y democrática en América Latina. Estas esperanzas terminaron frustrándose. Nicaragua es hoy una dictadura dirigida por uno de los principales líderes de lo que fue el Frente Sandinista de Liberación Nacional, Daniel Ortega. En términos de supresión de las libertades democráticas y violación de los derechos humanos, el régimen actual no le debe nada a la dictadura de la familia Somoza.

¿Qué factores llevaron a Nicaragua nuevamente a la dictadura? ¿Qué caminos se presentan hoy para que el país se libere de un régimen brutal de opresión? ¿Cuál es el papel de los demás países, en general, y de los latinoamericanos, en particular, en una eventual transición a la democracia?

Para debatir estas cuestiones, la Fundação Fernando Henrique Cardoso, el Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL) y la Fundación Puentes para el Desarrollo de Centroamérica invitaron a los exdiputados nicaragüenses Enrique Sáenz y Mónica Baltodano.